La falta de orientadores educacionales en Chile está generando graves consecuencias en el sistema educativo. Con solo 2,263 orientadores, muchos profesionales deben atender varios establecimientos, afectando la calidad del apoyo a los estudiantes. Esta situación es uno de los factores que incide en la elevada tasa de deserción estudiantil que tenemos en Chile, del 30%, que supera el promedio de la OCDE.
Más información en artículo de Claudio Núñez “Deserción de hasta 30%: los costos para Chile de la alarmante escasez de orientadores educacionales“.